Ya ha pasado casi un mes desde que acabo el 2020, y es el momento de hacer balance de como ha sido este año para el sector inmobiliario:
Echando la vista atrás hay que reconocer que hacia el mes de marzo las previsiones eran muy negativas respecto a la evolución el mercado, pero no ha sido así. una vez se pudo reanudarse la actividad, el mercado se reactivó y nosotros hemos conseguido cerrar el año con mejores datos que el año anterior.
En lo que respecta al mercado de segunda mano en la Comarca de Pamplona ha sufrido una caída en el número de operaciones de un 23%, pero el precio de la vivienda se ha estabilizado y hemos cerrado el año con un incremento de un 2% respecto al 2019.
En los últimos meses la preferencia de la vivienda ha cambiado, si bien es cierto que no hay una tipología en concreto, porque la realidad es que se ha seguido vendiendo todo el producto. Pero hay unas características que se valoran mucho más que antes. El que la vivienda disponga de una terraza o jardín se ha convertido en un requisito casi fundamental, pero también una orientación más luminosa y espacios más amplios sobre todo en la zona de día de la vivienda son también muy importantes.
Se está una tendencia interesante de vuelta a la zona rural, a los pueblos cercanos a la ciudad en los que disfrutar de tu vivienda rodeada de la naturaleza.
En el caso de la obra nueva, que es un mercado diferente. Sí se ha ralentizado un poco el ritmo de ventas durante 2020 por el confinamiento, pero a día de hoy sigue avanzando con normalidad. Al final, la facilidad de financiación y el Euribor más bajo de la historia están haciendo que la venta de obra nueva siga adelante. Además ahora mismo, las zonas donde hay más oferta, Lezkairu y Ripagaina están muy demandadas. Por no hablar de Salesianos que al ser un lugar exclusivo de Pamplona se va a seguir vendiendo.
En cuanto al mercado del alquiler sigue manteniendo su tendencia de estos últimos años, con una subida en precio de un 5% más o menos respecto a 2019. La demanda sigue siendo muy fuerte y este factor es determinante en la evolución del mercado. Sobre todo porque seguimos teniendo una oferta muy escasa con la que no conseguimos dar servicio a todos los clientes interesados.
Después de la experiencia de 2020 es difícil predecir algo a medio plazo, pero lo que está claro es que lo que ocurra va a depender de 3 factores: la confianza del consumidor en el sector, el avance de la vacunación y la facilidad de financiación. En definitiva, dependiendo de cómo avance la crisis sanitaria y cómo ésta afecte a la economía veremos una u otra evolución. Pero si todo sigue su curso, es muy probable que veamos una estabilización de precios o incluso un pequeño descenso de los mismos durante este año.